¿Manifestaciones direccionadas o denuncias reales?, así la vida en Villagrán

Villagrán, Guanajuato. Cerca del mediodía y en pleno discurso del gobernador del estado, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, un grupo de al menos 60 mujeres intentó llegar a la zona del evento preparado por el gobierno estatal donde minutos después sería colocada la primera piedra de lo que será el Instituto de Formación Policial de la Policía estatal (INFOSPE).
200 metros antes del punto central del evento, unos 40 elementos de seguridad estatal frenaron el paso a las mujeres que portaban pancartas exigiendo la salida de la FSPE de su comunidad, quienes consigo además de llevar el rostro cubierto, portaban un globo blanco, en señal que iban en son de paz.
Al ser retenidas, comenzó la disputa y los reclamos; lanzaron señalamientos directos contra los elementos de la FSPE, acusándolos de las desapariciones de esposos, hijos y familiares a partir del operativo Golpe de Timón, como el caso de Alejandra “N”, quien ya en el recorrido del gobernador por las calles de la comunidad Santa Rosa de Lima, pidió su intervención para esclarecer el caso de la muerte de su esposo David “N”, de 29 años de edad, quien fue levantado en la comunidad Caracoles, por elementos de seguridad estatal.
“Yo no quiero que me den apoyos ni nada, tengo dos hijos de 5 y 2 años de edad y sola los voy a sacar adelante; me quieren dar despensa, apoyo económico y becas para mis hijos, becas de qué, Yo no quiero eso, no estoy buscando dinero, quiero que se esclarezca la muerte de mi esposo y que se castigue a los responsables”, exigió Alejandra con voz serena y a su vez con la impotencia que muestra una mujer que de la noche a la mañana perdió al pilar de su familia.
La mujer de 26 años de edad, dijo conocer el panorama que se vive en Santa Rosa, sin embargo, reprochó que tachen a todos por igual y que las autoridades de seguridad abusen de su poder, de un uniforme y de sus armas para transgredir sobre personas que no tienen ninguna relación con el trasiego de drogas ni de huachicol.
“El 23 de febrero me lo entregaron muerto, hay videos que fue la FSPE quien lo levantó, de hecho, lo levantaron con otro muchacho del que no se sabe nada hasta hoy. Mi esposo trabajaba en riegos, estaba con un amigo y de la comunidad de Caracoles lo levantaron y del otro muchacho no se sabe nada. Hay testigos que fueron los FSPE quienes los levantaron. A mí me llamaron de Salamanca para ir a reconocer el cuerpo al forense”, narró.
Alejandra dejó claro que no busca ayuda económica del gobierno, sino justicia y se castigue a quien le quitó la vida a David, su esposo.
“Yo no quiero ayuda de ellos, no fue justo lo que hicieron, yo sola sacaré a mis hijos adelante, porque es pura hipocresía lo que están haciendo, los FSPE trabajan para ellos (el gobierno estatal) y quiero que se castigue a los responsables. He estado viviendo muy mal a partir de la muerte de mi esposo, es todo lo que puedo decir”, expresó, luego contener el llanto y apartarse del tumulto.
Tras dos minutos de intercambiar un diálogo con el gobernador, quien la canalizó con los asesores y asistentes del gobierno estatal, Alejandra, de las pocas mujeres que se manifestó con el rostro descubierto, se alejó del túmulo con la esperanza de que su queja sea escuchada.